Izoceño-Guaraníes.
Etnohistoria.
Los izoceños pertenecen a los pueblos de habla arawak, conocidos generalmente con el nombre de chané. Excavaciones arqueológicas en Pailón y durante la construcción del gaseoducto a Brasil han confirmado su presencia en el Chaco por lo menos a partir del siglo VIII. Desde el siglo XV los ava-chiriguanos ejercen dominio sobre ellos e inician la guaranitización de su cultura. A mediados del siglo XIX entraron los primeros ganaderos al Izozog, pero debido a la resistencia indígena recién lograron afirmarse después de la batalla de Kuruyuki en 1892. La pérdida de la independencia y la libertad provoca grandes olas migratorias a la Argentina. Los Capitanes Grandes del Izozog buscan, con cierto éxito, el mejoramiento de su situación legal. Caminatas heroicas de delegaciones izoceñas a La Paz en 1927-28 y 1944-45 tuvieron como corolario la entrega de los primeros títulos. Durante la Guerra del Chaco participaron activamente: en 1934, 2.500 izoceños fueron llevados como prisioneros al Paraguay; la mayor parte logró huir y regresar al Izozog. Por falsas denuncias de ganaderos cruceños, que pretendían apoderarse de las tierras indígenas, varios líderes izoceños fueron fusilados como traidores a la patria.
Economía.
Es un pueblo agricultor, como resultado de su origen arawak. La zona del Izozog constituye una de las regiones más secas del país y la agricultura sólo es posible mediante riego. Igualmente importante es la pesca, la caza y la recolección. La pesca se realiza cuando el río tiene agua y métodos de conservación permiten el consumo de pescado hasta muy entrada la estación seca. La caza y la recolección ganan importancia cuando los productos de las chacras se agotan. El principal producto es el maíz; además se siembra frijol, arroz, yuca y joco. Las cabras y ganado vacuno que tienen es para consumirlo en las grandes fiestas, pero también están destinados para adquirir productos de los que carece la región.
Otra fuente de ingresos es el trabajo asalariado. En los últimos 30 años una buena parte de esta población migra al norte cruceño para trabajar en la zafra. Las condiciones de trabajo son pésimas y los patrones tratan de mantener a los izoceños en una dependencia de deuda para garantizar su presencia forzada en las zafras futuras. En los últimos años ha cobrado una cierta importancia la producción artesanal, impulsada por la ONG Artecampo-CIDAC, que posibilita a las mujeres aportar con ingresos monetarios a la economía familiar.
Organización social y política.
La organización política se basa en la Capitanía del Alto y Bajo Izozog (CABI). Se reconoce un Capitán Grande que representa a todas las comunidades del Izozog. Este está asistido por los Capitanes del Alto y Bajo Izozog y de las comunidades. El cargo de la Capitanía tiende a ser hereditario, especialmente el de Capitán Grande. La Capitanía sugiere una estructura muy vertical, pero los Capitanes no toman decisiones propias, pues todo debe ser consultado en las reuniones a las que convocan y en las que las decisiones deben ser tomadas por consenso. Más que jefes, los Capitanes representan una fuerza unificadora dentro del grupo y figuran como sus representantes hacia fuera. La Capitanía del Izozog ha tenido un papel muy importante en la formación del CIDOB (Confederación Indígena de Bolivia). Ha ganado mucha fuerza en los últimos años, pues negocia con entidades nacionales e internacionales. Desde 1994 las comunidades del Izozog forman una subalcaldía. Actualmente la CABI administra el Parque Kaa Iya en el Chaco boliviano.
Cosmovisión.
En los años 20 entraron los fundamentalistas al Izozog. La Iglesia católica actúa desde los años 60 en la región. Aunque los izoceños se consideran cristianos, los misioneros no han podido erradicar la cosmovisión y el pensamiento indígena. La cosmovisión izoceña no se diferencia mucho de la de los ava-chiriguanos y tiene su origen en esta cultura, pues queda muy poco de la cultura chané.
Hay muchas manifestaciones religiosas que se mantienen con fuerza; una de ellas es el "carnaval", que a pesar de su nombre no guarda ninguna relación con el cristianismo. El "carnaval" es una fiesta en la que todas las comunidades del Izozog se visitan mutuamente y en la que se juntan los vivos con los antepasados que se presentan con máscaras de muy diversos diseños que caracterizan la personalidad del difunto. Esta fiesta, que se celebra después de la cosecha del primer maíz, fortalece la cohesión del grupo y une a los antepasados en una sola voluntad para superar las dificultades y mantener la unión mediante las tradiciones.
Situación actual.
Económicamente no están consolidados. Sigue la dependencia del trabajo asalariado que causa la migración del 50% al 80% de la población masculina. La ausencia prolongada del Izozog impide mantener las acequias y los cercados de las chacras en buen estado, lo que disminuye la rentabilidad de la agricultura. Un proyecto de salud iniciado por la Cruz Roja Suiza ha introducido la medicina occidental, la que combinan con la tradicional. Actualmente hay proyectos que procesan medicamentos que son usados en la medicina tradicional para el mercado.
Aunque algunos partidos políticos han tratado de distorsionar la unidad de la organización tradicional, ésta se muestra lo suficientemente fuerte para enfrentar cualquier desafío y las situaciones de cambio que sufren los pueblos indígenas. Las autoridades -corregidores, alcaldes, presidentes de OTB- se subordinan a la organización tradicional, la Capitanía. La situación territorial, especialmente la de las comunidades, no está todavía consolidada. La creación del Parque Nacional Kaa Iya abre posibilidades no tradicionales en las que los izoceños pueden ser protagonistas.
Fuente. Libro: Santa Cruz. Tiempo y Espacio. Año: 2000. Autor: Cooperativa Rural de Electrificación (CRE). Bernardo Fischermann.