Mapa: Nombre: Palmera de Saó. / Categoría: Área Protegida Municipal. / Acción: Creación, 2005. / Instrumento Legal: Ordenanza Municipal Nro. 018/2005. / Área: 758 hectáreas. / Jurisdicción: Provincia Cordillera. Municipio de Cabezas.
Nombre: Palmera de Saó. / Categoría: Área Protegida Municipal. / Acción: Creación, 2005. / Instrumento Legal: Ley de la República Nro. 3491/2006. / Área: 758 hectáreas. / Jurisdicción: Provincia Cordillera. Municipio de Cabezas.
Nombre: Palmera de Saó. / Categoría: Reserva de Vida Silvestre. / Acción: Creación, 2005. / Instrumento Legal: Ordenanza Municipal Nro. 008/2010. / Área: 758 hectáreas. / Jurisdicción: Provincia Cordillera. Municipio de Cabezas.
Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.
Reserva de Vida Silvestre.
El departamento de Santa Cruz tiene un total de 59 palmeras nativas, muchas de las cuales se prodigan en productos, bienes y servicios para beneficio de los pobladores del departamento. Con o sin intervención del hombre, regalando sus partes -hojas para techar, para tejer, para adornar; frutos para comer, para alimentar animales silvestres y domésticos; semillas para fabricar bisutería; tallos para cercar, apuntalar, y fabricar utensilios y armas, y también para techar y conducir agua; fibra para acolchonar-, las palmeras nativas de Santa Cruz son parte habitual de la vida cotidiana del hombre de campo, que ha preferido seguir usándolas como siempre, a la vieja usanza, a pesar del surgimiento de modernos y aventajados productos sintéticos.
Una de estas generosas palmeras es el saó, Thritrinax schizophylla, especie que se desarrolla en el ecosistema chaqueño, sobre suelos arenosos o arcillosos bien drenados, en ambientes secos, áridos, rodeada de otras especies de vegetación baja, espinosa, semidecidua. Su porte pequeño a medio, sus hojas en abanico que forman una vistosa corona de hojas flabeladas, sus tallos erectos y cilíndricos pero espinosos, de una singular belleza, la hacen deseable para jardines y paisajismo, aunque la dificultad de su manejo y la lentitud de su crecimiento a partir de semilla hacen que sea poco usada para tales fines.
Su uso más común es, sin embargo, otro y de trascendental importancia: desde tiempos antiguos se la utiliza para tejer con sus hojas más tiernas los sombreros que cubren las cabezas de los campesinos del llano, para protegerlos de los rayos del sol, como complemento de la recia estampa camba en las faenas rurales. Así, la palmera de saó es parte del patrimonio natural de la misma forma que el sombrero es un conspicuo componente del legado cultural cruceño.
Amenazada por la deforestación para agricultura y ganadería, que arrasó con miles de hectáreas donde vive la especie, el saó con sus atributos naturales y culturales ha necesitado de una reserva en la cual se pueda garantizar su sobrevivencia y educar a las nuevas generaciones sobre uno de los múltiples beneficios que el hombre ha aprendido a obtener de las plantas. Así, y con el objetivo expreso de conservar la especie como sustento de las familias que viven de ella, se creó la Reserva de Vida Silvestre Palmera de Saó, que protege a esta especie en una zona seca relativamente cercana a la capital, en las inmediaciones mismas de Paurito y otras comunidades menores, poblaciones donde centenares de familias artesanas explotan sus cualidades para el tejido fino de los rústicos sombreros campesinos.
El lugar de esta área protegida municipal de 758 hectáreas es un particular palmar en el que predomina el saó, un saosal, una mancha casi monoespecífica que también se denomina saotú, y que aparece como desprendida de otras poblaciones más continuas y extensas de la especie. Allí, de forma sostenible, pues su uso no daña la planta ya que solo se corta en la base el último retoño u hoja aún dentro de la vaina, antes de producirse la apertura y desarrollo foliar completo, la palma del saó es conservada y apreciada por la población local, que vive de ella y que con ella abastece el mercado interno de sombreros de su tipo, un tipo de sombrero amenazado por nuevas modas y modelos.
Para ello, el municipio de Cabezas, en la provincia Cordillera, y el cantón de Paurito, jurisdicciones administrativas a las que pertenece la reserva, en colaboración con la Dirección de Conservación del Patrimonio Natural de la Secretaría Departamental de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente, han desarrollado un plan de manejo y una zonificación que contempla áreas de recuperación, de manejo y aprovechamiento sostenible, de protección moderada y de protección estricta.
Protegida la especie, el sombrero que resulta del trabajo de hábiles tejedores de ambos sexos, entonces, se usa para que el mozo le quiebre el ala y aquerencie a la muchacha, para que le haga gambetas amorosas en los bailes de campo y las danzas regionales, para atizar las brasas cuando, a la vera del camino, se cocina un ligero locro carretero, para abanicar la cara y el cuello, para saludar y señalar de lejos, para recoger huevos, para abrigar esperanzas.
El sombrero y los palmares de saó luchan, no obstante, por permanecer y no ser sustituidos por productos de otra índole, y cada vez cobran mayor vigencia los versos del poeta oriental Pedro Shimose, con las ganas que compartimos todos de regalarle a una pelada "... para su santo un sombrero de saó, pa' que se tape y me tape a mí también, cuando yo la bese, debajo del ocoró..."(34). La música, pues, se complementa armónicamente con el sombrero de saó.
Fuente. Libro: Patrimonio Natural de Santa Cruz. Año: 2015. Autor: Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. Willy Kenning Moreno.
Foto: Áreas Protegidas Municipales · Palmera de Saó · Vista de la reserva. Autor: Willy Kenning.
Foto: Áreas Protegidas Municipales · Palmera de Saó · Thritrinax schizophylla, saó. Autor: Rubén Darío Azogue.
Foto: Áreas Protegidas Municipales · Palmera de Saó · Bosque de saó. Autor: Willy Kenning.